En España muchas escritoras, políticas y activistas sociales fueron masonas y tuvieron un destacado papel, poco conocido, en la lucha por alcanzar las libertades y los derechos para las mujeres.
Su compromiso las convierte en verdaderas pioneras de su tiempo. En su empeño les sorprendió el golpe militar de 1936 y la mayoría de ellas, masonas y republicanas, tuvieron que emprender el camino del exilio. Tras la dictadura, al configurarse nuevamente la masonería en España, las mujeres volvieron a participar en ella mediante las logias femeninas creadas a partir de 1984 por la masonería femenina francesa, que ya había logrado su condición plenamente regular e independiente. Desde entonces la masonería femenina en España ha ocupado un lugar propio.
“La Masonería Femenina en España”, Rosa Elvira Presmanes García.
La vinculación de la mujer a Logias independientes y exclusivamente femeninas, nace en España auspiciada por la Gran Logia Femenina de Francia. Tres mujeres españolas de Valencia, Barcelona y Madrid, se inician en la Logia “Illibeis” de Perpignan, para posteriormente participar en la creación de la Logia “Luz Primera” en Barcelona (1984) y más adelante en la Logia “El Crisol”, en Madrid (1988).
Así se consolidó la semilla sembrada por ese pequeño grupo originario conocido como el Triángulo Ariadna, que era visitado regularmente desde París para dirigir los trabajos y transmitir su Tradición a las jóvenes masonas españolas, comprometidas igualmente con el proyecto, y provenientes de distintos puntos de la geografía española, aunque iniciadas en Francia algunas, y otras en la primera Logia femenina, fundada cuatro años antes por la Obediencia francesa, como hemos indicado anteriormente en Barcelona, donde fueron iniciadas las primeras candidatas del Estado.
El 16 de Febrero de 2002, se constituye otra nueva Logia en Madrid, orientada a facilitar el acceso a las mujeres de esta Comunidad. Así nació la Logia Templanza.
La Logia El Crisol trabajó regularmente durante 16 años, hasta noviembre del año 2004. Debido a las diferencias de sus integrantes con las propuestas del planteamiento administrativo de la Obediencia madre, decidieron disolverse para reiniciar su camino, en este caso, auspiciadas por la Obediencia Mexicana, Gran Logia Femenina Luz y Armonía del Estado de Veracruz. Se clausuran los trabajos tanto de El Crisol como de Templanza dando por finalizada la relación con la Obediencia Femenina Francesa. No obstante, reabren en diciembre, con el nombre de Cibeles, y acogidas por la Gran Logia Mexicana, contando con la mayor parte de las Masonas que las integraban.
Este momento representa el inició de otra etapa que conlleva el crecimiento de las logias madrileñas, y la fundación de la Logia Tara en Gran Canaria el 15 de Mayo de 2005, fundada a partir de un Triángulo operativo que operó durante los tres años anteriores.
Nació El Gran Oriente Femenino de España, que cerró el año 2011 contando con cuatro Logias, después del reconocimiento y entrega de la carta Dispensa de la Logia Femenina Letona, Rita Zvaigzne en Riga y el nacimiento de la Logia Maat en Alicante.
A principio del año 2012, el GOFE, es admitido como miembro de la “Confederación de Grandes Logias Femeninas Regulares del Rito Escocés Antiguo y Aceptado”.
http://www.gofe.org/quienes-somos/origenes-del-gofe/
Del cisma producido en 2004, surge además La Gran Logia Femenina de España, “Institución masónica soberana e independiente, en el marco de la masonería liberal, laica y adogmática”, asociada con instituciones masónicas internacionales—es miembro del Comité de Ligazón Internacional de Masonería Femenina (CLIMAF)— y forma parte del Espacio Masónico de España (EME). Es una asociación, en palabras de Rosa Elvira Presmanes, “interclasista, intergeneracional y libre pensadora”. La integran actualmente 12 logias exclusivamente femeninas en Madrid, Cataluña, Alicante, Asturias, Canarias y Baleares.