La espada simboliza fuerza, autoridad, protección y coraje.

Es la protectora de los secretos y de los principios de la Tradición Masónica; la venganza que se abate sobre el traidor; la conciencia que atormenta al perjuro; el compromiso de mantener el secreto, de vencer las pasiones.

Es una herramienta dual: se utiliza para herir y matar, representa batalla y destrucción; mal usada, puede dañar a uno mismo. Por otro lado, protege, es un símbolo sagrado en la orden caballeresca.

Hay numerosos relatos bíblicos en los que las espadas son usadas como armas en la guerra espiritual. Entonces, también representa la sabiduría que atraviesa la oscuridad: las palabras sabias pueden actuar como una espada para acabar con la ignorancia.

Posiblemente el mayor mensaje simbólico que ofrece la espada sea sobre la muerte. Enfrentarse a la muerte nos enseña lecciones importantes. Un caballero en la batalla conocía, quizás mejor que nadie, la inmediatez y el valor de la vida. También, que no es lo mismo cortar que pinchar.

Entre los antiguos romanos, en todas las ocasiones públicas, un Lictor – uno de los guardias u oficiales que asistían a los principales magistrados romanos llevaba un haz de varas, a veces con un hacha insertada entre ellos, ante el Cónsul u otro magistrado como muestra de su autoridad y su poder para castigar a los criminales.

De ahí, muy probablemente, surgió la costumbre en la Edad Media de llevar una desnuda ante Reyes o Magistrados Principales. Encontramos que esta práctica prevalece, por ejemplo, en la coronación de Enrique III en1236: el conde de Chester llevó una espada, llamada “Curtana” y que no tenía punta, porque no era una espada de ataque, sino “un emblema del espíritu de misericordia que debe actuar sobre un soberano”.

Uno de los usos de la espada por un francmasón se debe a la intención de enfatizar simbólicamente que un dignatario está bajo vigilancia física. La Bóveda de Acero es formada por los Hermanos puestos en dos hileras, una enfrente de la otra y cruzando las espadas, para que por debajo de éstas pasen las personas a quienes se dispensan honores Masónicos.

Fue tan alta su estima en la Edad Media como parte del equipo de un caballero, que se dieron nombres especiales a las espadas de los héroes más célebres y renombrados, que nos han sido transmitidos en las baladas y romances de ese período. Este es un simbolismo con referencia al Verbo: dentro del cristianismo representa al espíritu: obra en ella un ser con voluntad propia.

Pero hay algo a lo que también debemos referirnos y es al temple: para que una espada tenga utilidad debe estar templada, al igual que un iniciado.
Templarse significa tomar conciencia de la propia esencia. Para ello es necesario ser sutil manejando las herramientas apropiadamente para encontrar la forma de transformarnos.
Una persona templa cuando alcanza una realización interior, un continuo equilibrio con las leyes del UNO.

La Espada nos enseña simbólicamente a: vigilar nuestros pensamientos, silenciar nuestros labios, y poner un centinela a nuestras acciones, preservando así una conciencia libre.

La espada flamígera se caracteriza por su hoja “ondulada”; simboliza la espada de fuego que se colocó al este del jardín del Edén, que giraba en todos los sentidos para guardar el camino del árbol de la vida (Génesis 3:24). No debe envainarse nunca, porque su misión es mantener alejados, en todo momento, a los profanos y espías, (además, el fuego no se puede envainar, y al representar a la Ciencia y a las Virtudes éstas deben estar al alcance de todos).

Sobre la mesa del venerable maestro se deposita una espada flamígera. Con ella abre y cierra los trabajos, recibe al recipiendario como aprendiz masón, le aumenta el salario a Compañero y exalta al grado de maestría.

Nuestras Tenidas están custodiadas por un Hermano-a que se sitúan ante la puerta con una espada. Esta es una de las pocas tradiciones universales para todas las “formas” de Masonería. Esto indica lo peligrosa que era esta tarea, ya que el Guarda Templo se enfrentaba a impostores y atacantes con la espada en la mano. La Masonería mantiene un vínculo con la historia antigua: una persona con una espada guarda la puerta para que la Logia pueda permanecer tranquila y protegida. También tiene una tarea importante en las iniciaciones, aumentos de salario y exaltaciones a la maestría.

Arma antigua que debe sostenerse correctamente, como indica el Ritual. Cuando permanece sentado en logia, el hermano Experto ha de sostenerla con la mano izquierda apuntándola hacia el suelo, para la descarga de energía. Circula con ella cuando cumple con su oficio y borra con su punta el cuadro de cada Tenida.

El Guarda Templo debe sostener su espada con la mano derecha, para dar aspecto de mando y autoridad, capaz de repeler al intruso en el plano físico o espiritual, lo que viene a constituir su misión en Logia.

En la Iniciación masónica, la espada del Experto apunta al profano al entrar en el Taller, como una luz y un relámpago ante el vendado, que más adelante se encontrará rodeado de espadas apuntando a su corazón, para indicar el castigo que seguiría a la violación de su silencio.